miércoles, 6 de junio de 2012

CAPÍTULO 25


¡¡CHICAS!! NUEVO CAPÍTULO Y MUYY DIVERTIDO




Capitulo 25


A Lali se le ocurrió que necesitaba hacer una cosa más para cambiar su imagen, así que el lunes a la hora del almuerzo fue a la farmacia de Clud y compró unos cuantos condones.

La de Clud era la más conveniente de las tres farmacias que había en el pueblo, ya que Cyrus Clud llevaba toda la vida viviendo en Hillsboro y conocía a todo el mundo, y además la cajera era su mujer, Barbara, así no tenía que pagar sueldos a nadie. Barbara Clud era una chismosa por lo menos tan grande como Beulah Wiison, y no sabía lo que significaba la palabra «discreción»; así fue como llegó a conocimiento de todos que determinado concejal del ayuntamiento tomaba Viagra. Por lo tanto, el hecho de que Lali Espósito hubiera comprado condones se extendería a lo largo y lo ancho de su círculo de amistades. Visitar locales nocturnos estaba bien, y probablemente eran el mejor territorio para salir de caza, pero Lali no quería dejar de lado tampoco a los hombres que hubiera disponibles en Hilisboro; de hecho, para ella sería mucho mejor elegir a un vecino, ya que quería vivir cerca de su familia. El problema era que no conocía a muchos hombres solteros del pueblo; los pocos que acudían a su iglesia eran todos más jóvenes que ella, y de todos modos no los encontraba particularmente interesantes. Hank Farris estaba soltero, pero los Farris eran gentuza y había una razón para que Hank no se hubiera casado nunca: que apestaba. De modo que Lali no lo tuvo en cuenta como posible candidato.

Pero la gente hablaba, sobre todo en un pueblo pequeño como Hilisboro, con su telaraña de parientes y conocidos. No había más que decir: «¿Conoces a la hija de Majo Espósito, Lali? ¿La bibliotecaria? Me he enterado de que ha ido a la farmacia de Clud y ha comprado una caja entera de condones. Santo cielo, ¿qué estará tramando esa muchacha?» Antes de que se diera cuenta, empezarían a surgir de todas partes hombres interesados. Tendría que ir descartando los indeseables, naturalmente, pero suponía que habría una gran porción de ellos que desaparecerían cuando descubrieran que no tenía intención de usar ninguno de los condones. Sólo le servirían para dar tema de conversación.

Por otra parte, jamás había pensado que comprar condones fuera una cosa tan complicada. Se quedó en el pasillo número cinco observando las filas y los montones de envases. ¿Quién demonios iba a imaginarse que había tanto surtido? ¿Y qué compraban actualmente las mujeres jóvenes y sexualmente activas? Por ejemplo, ¿un producto denominado Jinete Duro era algo deseable o no? Lali pensó que probablemente no, porque le sonaba a algo que compraría una pandilla de moteros, suponiendo que los Ángeles del Infierno usaran condones. ¿Y las nervaduras? ¿Importaba que un condón tuviera o no nervaduras? ¿Lubricado o sin lubricar? Pensándolo mejor, optó por lubricado.

Y pensándolo mejor aún, Cyrus Clud tenía una enorme variedad de condones, muchos más de los que habría esperado encontrar en una farmacia pequeña e independiente. Seguro que las ventas de condones no eran tan elevadas, dado que se podían encontrar en otros muchos sitios.

Cogió una cajita que decía: «Cautívala», leyó el dorso y la devolvió rápidamente al estante. Tal vez Cyrus tenía una clientela específica. A lo mejor debía advertir al jefe Lanzani de que vigilara el pasillo cinco de la farmacia de Clud, porque a juzgar por la variedad que podía encontrarse allí, en Hilisboro estaban pasando cosas muy sospechosas.

Por fin, desesperada, eligió una cajita con el nombre de PartyPak, que debería cubrir todas las bases, y se dirigió a la caja registradora, donde plantó el PartyPak en el mostrador delante de Barbara Clud.

—Espero que Majo y Gimena se encuentren bien —dijo Barbara amablemente al tiempo que tomaba la cajita; ese era su modo de iniciar una conversación para enterarse de si le sucedía algo a alguien. Entonces se dio cuenta de lo que tenía en la mano y lanzó una exclamación ahogada.

—¡Lali Espósito!

Notó que alguien se ponía detrás de ella, pero no volvió la cabeza para ver de quién se trataba.

—En efectivo —dijo, como si Barbara le hubiera preguntado, y sacó rápidamente varios billetes de la cartera para acelerar la operación antes de que la mitad de Hilisboro se apelotonara frente a la caja. Creía que iba a poder llevar a cabo aquello con un aire de sangre fría, pero sintió cómo se le inflamaba la cara. Cualquiera diría que Barbara jamás había vendido condones en toda su vida, a juzgar por su expresión estupefacta.

Barbara comenzó a ponerse colorada también.

—¿Tu madre está enterada de esto? —susurró inclinándose hacia delante para que la conversación fuera más privada. Gracias a Dios que por lo menos lo intentó, pensó Lali.

—Aún no, pero se enterará —murmuró Lali, pensando que las líneas telefónicas iban a incendiarse en cuanto ella saliera del establecimiento. Le tendió el dinero a Barbara, en un nuevo intento de terminar de una vez con aquello.

—Tengo prisa —dijo una voz grave y profunda detrás y por encima de ella; últimamente la había oído con demasiada frecuencia. Si pudiera, se hubiera esfumado allí mismo.

El rostro de Barbara adquirió un matiz morado mientras pasaba la cajita por el lector del código de barras, la caja registradora hizo un ruido característico y seguidamente apareció el total en el pequeño visor. Tomó el dinero de Lali, le entregó el cambio sin decir palabra y metió el PartyPak en una bolsita de papel blanca que llevaba el rótulo «Farmacia de Clud» impreso en letras rojas. Lali se guardó el cambio en la cartera, recogió la bolsita de papel y, por primera vez en su vida, salió de la farmacia sin dar las gracias a la persona que la había atendido. Para su total horror, el jefe Lanzani no compró nada, sino que se limitó a caminar con ella.

—¿Qué está haciendo? —siseó cuando salieron a la acera—¡Vuelva a entrar y compre algo!

Quizás el color escarlata de su cara pudiera atribuirse al calor que ascendía en volutas desde el pavimento. Quizás él no notase que se sentía mortificada.

—No necesito nada —repuso el policía.

—Entonces, ¿para qué ha entrado en la farmacia?

—La vi entrar y sentí deseos de hablar con usted. Así que condones, ¿eh? —dijo, observando con interés la bolsa de papel—. Parece una caja bastante grande. ¿Cuántos lleva dentro?

—¡Vayase! —se quejó Lali, caminando por la acera con el PartyPak aferrado contra el pecho. Cuando se le ocurrió el plan de comprar condones para que los hombres se fijaran en ella, no estaba pensando precisamente en el jefe Lanzani, y desde luego tampoco en aquel momento. Tuvo una visión medio histérica de una fila de hombres siguiéndola por la calle, intentando mirar lo que llevaba dentro de la bolsita—. ¡La cajera se ha creído que los he comprado para usted! —Hasta el momento, al menos una persona, quizá dos, se había enterado de la noticia de que el jefe Lanzani y Lali Espósito habían comprado una caja enorme de condones. ¡El jefe de policía incluso había comentado que tenía prisa! Lali reprimió otro quejido.

—Sé comprarme condones yo sólito, gracias —dijo él.

—¡Ya sabe lo que quiero decir! Se ha creído que eran para nosotros dos, que usted y yo... —No terminó la frase, incapaz de expresar la idea en voz alta.

—Tendríamos que ser unos auténticos conejos para usar tantos a la hora del almuerzo —observó Lanzani—. No me parece posible. ¿Cuántos trae la caja, seis docenas o así? Eso hace setenta y dos, de modo que aunque dispusiéramos de una hora entera, quiere decir que tendríamos que usar, pongamos, uno cada quince segundos. —Calló unos instantes y adoptó una expresión pensativa—. Ése es el récord que quiero fijar. Uno cada hora, o cada dos horas, eso sería otra cosa.

Lali se sintió medio mareada de la impresión, aunque supuso que se debía al hecho de ir corriendo bajo el calor del mediodía. Como él tenía las piernas más largas, caminaba a su paso normal, ni siquiera jadeaba.

No era que Lali estuviera jadeando; no quería ni pensar siquiera en jadear mientras él hablaba de gastar un condón cada hora. Estaba respirando deprisa, eso era todo.

—Está acalorándose —señaló él—. Vamos a detenernos en el Coffee Cup para tomar algo frío, antes de que se desmaye en la acera y tenga que llevarla en brazos.

Lali se volvió de repente y le espetó con rabia contenida:

—¡Probablemente la cajera habrá llamado ya a mi madre, y Dios sabe a quién más, y le habrá contado a todo el mundo que hemos comprado una caja PartyPak de condones en la hora del almuerzo!

—En ese caso, lo mejor que podría hacer usted es entrar conmigo en el Coffee Cup, y así tendremos testigos de que no hemos ido a mi casa a hacer lo posible por gastarlos todos. PartyPak, ¿eh? —Sonrió de oreja a oreja—. Seguro que trae una variedad interesante. Déjeme ver.

—¡No! —chilló Lali, y se dio media vuelta cuando él intentó coger la bolsita.

Lanzani se frotó la mandíbula. —Es probable que exista una ordenanza que prohibe llevar objetos pornográficos por la calle.

—Los condones no son pornográficos —replicó ella, sintiendo que se le hundía el estómago—. Son productos para el control de la natalidad y para la salud.

—Los condones normales sí, pero es probable que haya cosas más raras en una cajita que dice PartyPak.

Lali se mordió el labio. El policía no iba a detenerla; estaba casi segura. Por otra parte, toda aquella operación se le había ido de las manos tan deprisa que todavía le duraban los efectos, y no estaba preparada para forzar su suerte. De modo que le entregó la bolsita sin decir nada.

Lanzani no se limitó a abrirla y mirar dentro; introdujo la mano y sacó el PartyPak, en plena calle. Lali buscó alrededor una alcantarilla donde zambullirse, aunque le habría servido igual cualquier agujero. Apenas había logrado apartarse ligeramente de Lanzani cuando de pronto él la aferró del brazo y tiró de ella hacia atrás, todo ello sin levantar la vista de la etiqueta que había en el reverso de la caja.

—Diez colores y sabores diferentes —leyó en voz alta—. Incluido chicle, sandía y fresa. —Alzó la mirada y chasqueó la lengua—. Me sorprende usted, señorita Lali.

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GIULA: DULCES SUEÑOS Y MAÑANA PODRAS LEER TU CAPÍTULO. GRACIAS POR SIEMPRE COMENTAR

DUO SONRISAS: RECOMENDO SU BLOG  http://duosonrisas.blogspot.com.es/

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LAS QUIERO

FATY****


21 comentarios:

  1. Jajajaja es un cretino!!!!
    Pobre Lali, yo me hubiera muerto ahí mismo de la vergüenza!! Dan ganas de matarlo y peor es pensar cómo se va a divertir Peter con todo esto! jejeje
    Quiero más!
    Lore456

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  2. jaja me meo, primero problemas para comprar condones, despues que todo el mundo se enteraba y por encima preservativos con sabores y colores jaja y bueno yo creo que ahora debian de aprovecharlos jaja

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  3. Lina (@Lina_AR12)7 de junio de 2012, 0:17

    Me encantó,ella muertade vergënza y él sacando cuentas y mostrando "eso" como si nada,le encanta ponerla nerviosa,pero me juego q Lali estrena condones con él,JAJA!

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  4. Jajajaja me encanta...estoy deseando de leer cuando lali se de cuenta que le gusta el jefe Lanzani...

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  5. Yo tambien te echo de menos esque esta semana me tocalibrar en finde y tengo menos horas libres al dia para meterme, solo lo hago un ratiro por las noches cuando estoy en la cama...si me da tiempo te escribo mañana, aunque no puedo prometerte nada porque voy de tarde...y por la mañana aprovecho para dormir y recoger un poquito...besos

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    1. Gracias x el pedido a minovelalaliter,aún no consigue ponerlo,y lo compruebo siempre.GRACIAS.¿leiste las k te recomende?.

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    2. No porque intento encontrarla y me sale fotolog no me sale blog

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    3. chicas!!! Cómo les va?! Puede ser que el blog del que hablan sea este http://happinesslaliter.blogspot.com/?! espero que sí y les sea de ayuda! la nove ES buenisima!

      Besos

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  6. si ya se pelean sin estar juntos, cuando lo esten van a ser un show jajajaja XD en un pueblo todo se sabe, y en lo que no es un pueblo también... solo hace falta tener más de un vecino cotilla

    me encantan estos dos, son geniales de verdad =) esperando mas muchos besos ♥

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  7. mas,mas novela espero con ansia que pasara mañana con lo que esta leyendo lanzani,la va a matar.

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  8. Estoy pensando k el cómplice d Gastón es Peter,jajaja,la sigue bien d cerca,y no le va a dar ni un respiro,a este paso Lali aprende todo con el.JAJAJA,tremendo el cap,la deja casi sin habla a LAli ,y a mi muerta d risa.

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  9. ahhhh no! me tente! jajjjajajaj que buen capi en serio! no pueden ser así estos dos el tan pesado queriendo llevarla al borde de la irritación y la molestia y quien sabe de cuanta cosa más ;P jajajja y ella tan vergonzosa y recatada que va a comprar condones para que el pueblo se entere y al final no quiere que la cajera llame a su mama porque creyo que estaba con Peter! quien la entiende! igual para mi que inconsciente o bastante conscientes de ello ya están en algo!

    Espero más nove gordi! ME ENCANTA! besos y te quiero!

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  10. Muy bueno... me encanta la verguenza de lali y la indiscreción de Lanzani!!!!
    muy interesante historia

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  11. No, no!! ES un genio lanzani, lo q me hizo reír no tiene nombre, lali es muy buena, hace una caso y se termina arrepintiendo ja ja más!

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  12. Me he reído demasiado con el cap, por más que Lali haya querido ser el chisme del pueblo Peter si que se pasó dando a entender que estaban juntos y que los condones era para el, pobre Lali muerta de vergüenza.
    Este cap me hizo recirdar cuando estaba en la uni y llevé clases de sexualidad,la profe nos envío a comprar preservativos y observar las reacciones de las personas, yo cómo Lali fui a una farmacia cerca de casa y me atendió una señora, era la 1 vez que yo compraba pero sabía de marcas jaja:) y de frente le pido una marca determinada y con sabores y me queda mirando sorprendida y mientras lo sacaba del estand empezó a murmurar con la otra cajera, en Perú todavía existen muchos prejuicios y machismo.
    Ruthy_lu

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  13. SI ESTOY VIVA!! paso por aquí lei el cap!! se ve mmuuuuy buena jajajajaja Lanzani es Cruel xD.

    SE TE EXTRAÑAAAAA!!!!!

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  14. ajajajajajajajja TE JURO ME MORI' AHI NO MAS!! DIOS QUE VERGUENZA HUBIERA PASADO YO AJAJJA la chica de la caja habrà creido lo que a ti te gustaria que pase lali! ademas eso de ir a esa farmacia porque mas conveniente y porque la chica no conoce la palabra discrecion me hizo sonreir y acordar algunas anectodas mias que mejor no cuento ahora jajaja! dale lalita admitì que te gusta pedrito ajja es zarpado ese jefecito eh.. quizas lali deva experimentar un poco mas para dar un cambio definitivo! te juro que cuando peter leyo el paquete y estava escrito "Diez colores y sabores diferentes —Incluido chicle, sandía y fresa me imaginè en la situacion de lali y por mi me hubiera escapado!! dios esta lanzani esta on fire!! tanto se preocupa por la señorita esposito pobre, tiene que hacerla entrar en calor, para mi que no fue por correr bajo el sol, sera el que la hizo entrar en calor? tiene un aspecto tierno y a la vez zarpado el jefe lanzani eh! oh ahora todo el pais sabrà que entre ellos hay algo o por lo menos eso van a pensar.. pregunta..de 1 a 10 cuanto les disgusta eso? para mi que 0!! tenias razon al final..un capitulo re re re divertido y que me alegro mucho el dia te aseguro! es un placer firmar porque de verdad, se que lo dije muchas veces ya, pero es como si confiara cosas mias en vos..es como si me estuviese descargando es una sensacion de libertad y tranquilidad que no quiero dejar de sentir! me siento libre leyendo tu nove!! y de eso tengo que agradecerte solo a vos GRAZIE!!! Giulia

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    1. hoy tambien tengo que irme... pasado mañana termino el colegio asi voy a poder quedarme hasta mas tarde...mientras tanto estudiè para economia politica y los contratos ajja no aguanto mas! bueno que decirte..te leo mañana! no voy a parar nunca de agradecerte, y lamento el no poder firmar apenas has subido, pero bueno no se puede tener todo no? te mando un abrazo gigante y no olvides que en otro pais, italia, estoy yo que empeze a quererte como a la nove eh! mira que es mucho ajajja te mando un beso. giulia

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  15. jajajaja pobre Lali!! Yo seria muerta de verguenza! Entiendo que Peter quiere que ella se muere por el, pero asi no va a llegar a ningun lado y ¿por qué tiene que averguenzarla asi en la calle?
    jajajaja como me rio con estos dos :D
    Besos
    Giada

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  16. JAJAJAJAJAAJAJAJA POR DIOSSS YO ME MUERO DE LA VERGUENZAAAA AJAJAAJAJAJ XD BUENISIMOOOO ME RE TENTEEE JAJAJAJAJAJ AME ESTE CAP; ENCIMA CUANDO LO VI DIJE QE SON ESAS COSAS GOMITAS::: Y DESPUES DIJE A LA MIERCOLES JAJAJAJAJJA ENCIMA CN LO ULTIMO QE DIJO PETER DE LOS GUSTOS JAJAJAJAJAJA POR DIOSSSSSS :P @LuciaVega14

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