Capitulos XVII, XVIII & XIX de "A pesar de todo"

CAPITULO XVII: SIN BESARNOS

Después de esa muestra de amor, comenzamos a ver la peli, intrigante, desesperante, seductora, caliente. Supuestamente la peli era así, pero nosotros entre mimos, besos, caricias, palabras lindas no nos dimos cuenta. Me resultaba raro toda esa situación, recién hoy nos veíamos después de semanas, recién hoy habíamos mantenido una pelea que había conllevado a nuestro primer BESO, recién hoy habíamos hecho el amor por primera vez, recién hoy habíamos tenido esa charla donde sacamos a la luz nuestros sentimientos por el otro y por ultimo recién hoy habíamos decidido estar juntos. Muchas emociones para un solo día y se lo hice saber.

-          ¡Bebé! –le hable mientras él me daba tiernos besitos en mi cuello-

-          ¿Qué pacho? – continuando con esa acción-

-          Que…no se…es todo tan raro…

-          ¿Qué cosa? –el seguía a lo suyo-

-          No se…esto…recién esta mañana nos dimos nuestro primer beso y ahora estamos así, en el sofá de mi casa, viendo una peli… no vamos muy rápido – él se separo de mi cuello y me miro-

-          ¿Vos estas contenta? Porque yo te aclaro que estoy feliz, hace mucho que no me sentía también y tan enamorado de alguien –yo me sorprendí ante esa palabra y él lo noto- porque te aclaro, que me enamoraste gallega. ¿Entonces vos estas contenta? –me volvió a repetir la pregunta, que no había contestado por semejante declaración-

-          Si! –le dije feliz y a la vez sorprendida- a mi me pasa lo mismo que a ti, hace mucho no me sentía de esta manera.

-          Entonces no pasa nada porque sea muy rápido, porque es lo que sentimos. Y por cierto, con Agus? –me pregunto con una ira de celos en su voz-

-          Con Agus nada…estábamos juntos de vez en cuando pero ya –su cara se transformo y yo lo note- eii!! –agarrando su cara- no pasa NADA pero NADA con Agus –aflojo un poco-

-          Si, está bien, igual ahora estás conmigo, no quiero a Agus cerca ok! –dijo con un tono de autoridad-

-          Pero por supuesto! –apretando sus cachetes- no hace falta que me lo digas, yo nunca jugué a dos puntas. Además lo que me pasa contigo no tiene nada que ver con lo que me pasa con Agus –besando esos lunares que me podían-

-          ¿Y qué te pasa con Agus? –los celos continuaban en el, yo reí-

-          Nadaaa!!! ¡¡Es mi amigo y ya! ¿Y tú? –¿¿me miro con sorpresa- con la tal Lorena??

-          Jaja! –el humor le cambio de que la escena de celos se la hiciera yo- NADA, ya te dije, nunca más la volví a ver, fue un chape y ya está!

-          ¿Y besa mejor que yo?  -ahora era yo la celosa, aunque nunca se lo iba a reconocer-

-          Jaja! ¡¡Sos malísima!! –me dio un besito en mis labios- a vos nadie te supera hermosa-

-          ¡Que chamuyero eres!...- le di otro besito- … ¿ya te paso el ataque de celitis?

-          Yo celos? Por favor!! –como lo negaba el muy orgulloso-

-          ¡¡Sii tú!! Jaja!... ¡¡Dame un beso anda!!

-          ¡No! –yo me quede a cuadros- ¡estoy celoso viste! –ahí respire tranquilamente-

-          Jajaja!! ¡Me apuesto lo que sea a que me lo das!

-          Hecho –me estrecho la mano-

Sin ninguna inhibición, comencé a darle besos en la cara y muy lentamente pero sin besar sus labios. Baje por su cuello –él se encontraba en mi sillón y yo me senté arriba de él, en la famosa postura koala- le humedecí ese cuello hermosos que tiene, seguí con el lóbulo de su oreja, que es una zona muy erógena…como ya no me quedaba más carne que besar baje mis manos hasta el extremo de la remera para subirla, cuando el despacio se incorporo conmigo encima y se dirigió hasta mi cuarto conmigo en brazos. Llegamos al cuarto y él se tumbo en la cama quedando yo encima, seguí esa secuencia de besos pero ahora quitándole la remera despacio y dejando besos en su torso desnudo, volví a bajar dándole besos hasta la famosa V masculina. Le baje esos pantalones de rugby que llevaba puesto y me di cuenta que su cuerpo había reaccionado ante mi seducción. El comenzó a acariciarme el rostro y otra vez volvi a enfrentarlo, ni corta ni perezosa me saque yo misma mi remera de pijama, para continuar con mis short. Hasta ese momento nunca nos habíamos besado, Peter al verme solo con mi ropa interior, comenzó a masajearme la cola, suavemente, paso haciendo caricias por mi espalada lo que le facilito desabrocharme mi corpiño. Yo sin mi prenda superior, los dos a una prenda de diferencia. Me agarro de la cintura para darme vuelta y quedar yo debajo de él. Y fue su turno de darme besos, por mi cara, mi cuello que hacía que mi respiración aumentara notoriamente, al sentir ese cosquilleo que me producía, bajo a mis pechos, que los beso con ganas, succionando mis pezones para hacerme sentir un placer extremo. Continuo por mi panza y llego hasta mi culote negro que bajo con delicadeza, palpo un poco esa zona con sus manos y eso producía que me retorciera de placer, volvió a subir a mi boca, pero sin besarme ahora los dos desnudos, yo sintiendo su miembro a la entrada del mío. Me miro a los ojos con una sonrisa inmensa y de su boca salió.

-          TE AMO GALLEGA –me sorprendí al escuchar esa palabra, porque yo si estaba segura de que me había enamorado pero pensaba que a él todavía no le pasaba lo mismo, me quede colgada en sus ojos y no pude resistirme más-

-          Yo también TE AMO PITT –sonreímos con nuestros ojos aguados, pero sin lagrimas. Sin más que decir se introdujo en mi, susurrándome esos TE AMOS frente a mi boca sin ni siquiera unir nuestros labios-

Los movimientos comenzaron suaves, con delicadeza, el besaba mi cachete, la comisura de mis labios, mi cuello, estaba completamente entregada a él, me sentía tan protegida en sus brazos, tan feliz… cuando volvimos a mirarnos sentí que era el momento de ser yo la que le dijera esas hermosas palabras y así lo hice. 

-          TE AMO MI AMOR –me volvió a sonreír y me respondió de la manera que pueden imaginar, besándome mientras realizaba esos movimientos-

Los minutos pasaron y ahora la postura era al contrario, yo arriba con movimientos más sacados, nuestros cuerpos sudaban y eso hacía que nuestras hormonas estuvieran a full. Llegamos a ese punto máximo, con la típica postura del koala pero tumbados en la cama, el me tumbo sin salirse de mí para terminar con esos últimos movimientos. Esta vez no habíamos usado protección, pero yo me cuidaba así que no había problema, sentí ese calor en mi cuerpo de su descarga, sentí esas contracciones vaginales y sentí ese beso de amor que me dio unido a una sonrisa y un TE AMO.

Después de un rato más haciéndonos mimos y besándonos tranquilamente el paso al baño mientras yo me vestía, salió y pase yo. El ya me esperaba en el living y me hizo señas para sentarme en sus piernas. Me dio otro besito, mientras sonreíamos como dos tontos enamorados, que es lo que éramos y él hablo para acabar con ese silencio para nada incomodo de nosotros.

-          De lo que acaba de pasar, no hace hablar no? ¡Que a vos te gusta hablarlo todo! –me dijo en chiste-

-          No… -le di un besito- no hace falta, es algo que sentíamos por lo menos yo y te lo dije.

-          Yo también lo siento, por eso te lo dije –me respondió rápidamente, yo volví a darle un beso-

Entonces no hay nada más que hablar –hubo una pausa- ah! ¡No! ¡Sí que hay que hablar!! –dije tomándolo por sorpresa-

CAPITULO XVIII: PASO IMPORTANTE

-          ¿Qué cosa? –pregunto ante mi repentino exclamo-

-          Gane la apuesta –dije picara-

-          ¡No, no, no! ¡Eso no vale! ¡¡Vos me manipulaste!!

-          ¿Qué? Yo no hice nada, tú me bésate, asique perdiste…

-          ¡Además no apostamos nada! –me dijo con una leve sonido de triunfo-

-          ¿Cómo que no? Si ganabas tu me pedías lo que tú quieras y si era al contrario te pedía yo a ti! –le explicaba las reglas-

-          Oook! Haber… y ¿que querés vos? –me pregunto fastidiado porque había perdido-

-          Por empezar, un besito –le dije sonriendo-

-          Ok! Eso lo puedo arreglar –me comió la boca- listo!

-          Jeje! Para continuar…quiero ir a un lugar y nada de boliches!

-          ¿A cuál? –pregunto sonriéndome y dándome un lindo beso en la mejilla-

-          Desde que yo me vine a vivir a Buenos Aires he querido ir a un lugar… -el me dio pie para que continuara- a un lugar que se llama el Parque de la Costa o algo así ¿podemos ir allí? –con puchero y ojitos, cosa que el beso-

-          Sos una infantil bebe! Jeje! Pero bueno, ¿hay querés ir? –yo le asentí como si fueran una nena de 5 años- entonces vamos pero en una día entre semana porque el fin de semana está lleno de adolescentes y bueno…

-          Bueno no me importa, un día que ni tu ni yo trabajemos vamos! –le dije sonriente-

-          Perdonáme que no te pueda lleva en finde… -me dijo apenado-

-          ¿Estás tonto? No me importa, yo te entiendo en serio! –y le di un besito en el cachete-

-          Gracias… -y me dio otro piquito-

-          Estas tonto otra vez!? No me agradezcas por eso! Yo fui la que te dije de llevar esto en secreto ¿no? –el me miro-

-          ¡Por ahora! –yo le sonreí-

-          Si, por ahora es lo mejor bebé –y me dio otro beso para cerrar la conversación-

Pasaron semanas, meses exactamente, dos meses desde ese primer día “juntos”, después de esa charla el cumplió su la apuesta que perdió y me llevo al famoso lugar un día entre semana que ninguno trabajábamos y por tanto no había tanta gente. Disfrute como una enana y el no se quedaba atrás, se montaba en todos los cacharros que había.

En esos dos meses se empezó a rumorear por los medios de comunicación que Peter tenía “UN NUEVO ROMANCE”, ósea yo, pero nadie sabía, por suerte, solo mis amigos, sus amigos más cercanos y de las familias, lo sabían todos pero nunca hicimos presentaciones formales, aun era muy pronto para conocerlos y él a mi familia.

Entre nosotros la relación poco a poco se consolidaba más, los TE AMOS se hacía presente cada vez más y las cosas tiernas también. Sin dar vueltas, estábamos juntos, ya éramos grandes para que el me diga ¿quieres ser mi novia? El tiempo estaba acomodando la relación en una mejor posición y no hacía falta esa pregunta,  ERAMOS NOVIOS, por supuesto, nos tratábamos como tal, por tanto lo ERAMOS y punto.

En estos dos meses, fuimos salimos varias veces o solos o con amigos, ya sean los suyos o los míos. Pero para suerte de ambos, las únicas fotos que habían salido era de salidas con amigos, fotos donde salíamos riendo o mirándonos pero ya está.

Pero todo cambio en Julio, la historia dio un vuelco imprevisto, tanto en nuestra relación como en nuestra vida laboral.

Ultimo sábado de julio, habíamos decidido ir al estreno de una película argentina, el tenia una invitación privilegiada, porque la protagonista de la historia era una muy buena amiga suya, Eugenia Suarez, era una comedia romántica. Era la primera vez que esta chica se estrenaba en cine y como ellos habían compartido muchos años como compañeros de trabajo, habían formado una linda amistad, se trataban como hermanos. Esta chica hacia unos años que estaba de novia con un hombre llamado Nacho Viale, también amigo de Peter.

Cuando Peter me dijo de ir con el, lo rechacé, porque me moría de vergüenza estar expuesta a un medio como es la televisión. Pero analizando mi relación con él, me di cuenta que para poderla vivir sin ningún reparo de escondernos, debería dar la cara cuanto antes. Así después de días insistiendo acepte. Y ahí estaba yo, poniéndome linda para esa noche tan movidita. Decidí ponerme un vestido gris, con flores en rosas, con media manga y haciendo la manga un volado en el hombro, era cortito, llevaba medias en color carne y unos zapatos de taco negros. (http://www.laubfal.com/benjamin-amadeo-y-lali-esposito-juntos-pero-separados-para-las-fotos/)

 Por supuesto que llevaba una chaquetita para el frio y mi pelo recogido con una coleta al lado lacia. Maquillaje sencillo, cartera y perfume.

Llamaron al timbre y por la hora sabía que no podía ser otro más que él y así era.

-          Buenas, buenas –me dijo con una sonrisa de oreja a oreja…estaba tan…tan…CAÑO… pantalones vaqueros camisa blanca y su chaqueta negra- estas hermosa bebe –me dio un beso cortito en mis labios para que no se me fuera el labial-

-          Hola mi amor –dije con una mezcla de felicidad y nervios- tu también estas guapísimo.

-          ¿Estás lista gorda? –respire hondo-

-          Si, vamos.

EN EL AUTO…

-          Mi amor no estés nerviosa ¿sí? –me dijo con esa tranquilidad que lo caracteriza-

-          ¿Qué fácil decirlo no? Te juro que no lo puedo evitar –estaba histérica-

-          Tranquila gorda, ya todos los medios saben que estamos juntos, o por lo menos lo imaginan, ya es hora de confirmar ¿no?

-          …no se… ¿no nos estamos equivocando no? –dije mordiendo mi labio en señal de preocupación-

-          Vos no estás segura de lo que sentís por mi? –despego sus ojos del volante por unos segundos-

-          OBVIO, OBVIO que estoy segura bebe. Pero no sé, estoy nerviosa no lo puedo evitar. A mí me coge una cámara y no sé qué decir.

-          Gallega, antes de alguien te grabe te van a preguntar si querés y por supuesto que si salís en una cámara será conmigo mi amor! Así que no te preocupés ¿si?

-          Ok! Ok! –ni yo me la creía pero bueno-

Llegamos al lugar, todo estaba lleno de gente y de cámaras y yo cada vez mas nerviosa. Entramos a esa recepción, él sonriente agarrado de mi mano yo...hice lo mismo...es como un tic que tengo que cuando tengo cerca una cámara sonrío como la mas boluda!

Hay me encontraba yo, con una sonrisa de oreja a oreja viendo como todas las miradas se dirigían a la pareja de Lanzani, ósea YO, el día que mas vergüenza he pasado ha sido ese. Conseguimos pasar a otra sala donde había menos cámaras y Peter me miro. 

CAPITULO XIX: LA ENTREVISTA

-          Ya esta gorda, ya no hay tantas cámaras. Lo hiciste muy bien boluda! Sonreíste como la más profesional –yo aun seguía con mi sonrisa como si me la hubieran cosido a la cara-

-          Por fin…lo he hecho sin pensar. Es que eso me pasa cuando estoy muy nerviosa y veo una cámara cerca – el comenzó a reírse y me dio un tierno beso en la cabeza-

-          Jaja! Bueno tranquila mi amor. Voy a presentarte a gente que quiero que conozcas y por supuesto a Euge  -yo solo asentí-

Peter me presento a muchas personas, la verdad es que no me quede con todos los nombres, solo con algunos que había visto por televisión. Dos de ellos fueron Gastón Dalmau, compañero de trabajo de mi novio y Julia Calvo, definitivamente una grosa. A ella sí que la había visto en algunos teatros y en TV y me resultaba una mujer admirable y una artista de pies a cabeza, por supuesto que Gastón también. Ambos me trataron genial, fueron muy amables conmigo y me trataron como una más. Estábamos en esa charla con las dos personas anteriormente nombradas cuando apareció la que supuse que era Euge y se le tiro a los tres en un abrazo comunitario.

-          Pedritooo!! –le dio un abrazo-

-          Hola rubia ¿como estas? ¿nerviosa?–devolviendo ese abrazo-

-          Re, re, re, re –contesto completamente histérica-

-          Tranquilizáte entonces boluda, que seguro que sale genial –dijo entre risas-

-          Ojala boludo! –me miro a mí y después a él, para hacerle una sonrisa pícara- y… ¿no me vas a presentar? ¡¡Mal hermano!!

-          -riendo- ¡si! –me miro tierno y prosiguió con las presentaciones- ella es mi novia, Lali –después se dirigió a mi- mi amor ella es Euge –me acerque a ella para saludarla-

-          Encantada Euge – a lo que ella me respondió, la rubia volvió a mirar a mi chico-

-          Ya era hora que me presentaras –se volvió a mi- sos muy linda eh! –yo le respondí el cumplido y ella me “advirtió” – una cosa –dijo divertida- cuidámelo eh! Que este pibe es un dulce de persona

-          ¡Por supuesto! –le dije siguiendo su broma-

Estuvimos unos minutos más hablando nosotros cuatro con ella y ya se despidió porque daba comienzo a la peli. Nosotros cuatro decidimos sentarnos juntos y comenzamos a verla.

No era LA película, pero tenía un pase. Una típica comedia romántica pero con Euge de protagonista. Había momentos divertidos, que se hacían sonar en esa sala, momentos más tristes y el tan esperado final.

Después de acabarla fuimos a esos cóctel que hacen, donde también había muchos periodistas todos esperando a hacer sus notas. A Peter le hicieron unas cinco notas para distintos canales, yo aguardaba detrás no quería estar expuesta. Hasta que llego un señor “gordo y carismático” con un micro en mano y un cámara atrás de él. Quien si no que Darío Barassi. Apareció con tanta confianza con Peter que me partí de risa.

-          Eii! I´m not prostitute!! –riéndose-

-          Jaja! Que hacés man? Cuanto tiempo! –le contesto Peter y se dieron el típico abrazo de machos-

-          Y que lo digas boludo! Ei! Cheto! No te podés ir sin hacerte antes una entrevista con tu chica no?

-          Pero obvio cheto! Igual solo a mí, ella prefiere estar afuera de cámaras –dijo mi novio tan atento como siempre-

-          Ok! Pero Peter vos sabés que yo mañana tengo que hacer algún comentario sobre ella –me miro y me tiro una sonrisa- ¡pero ojo! Nada malo porque sos muy linda –yo me puse colorada y saltó mi novio para defenderme-

-          Che! No te pasés vos! Que es mi chica! –dijo con el chiste aunque yo sabía que una parte era en serio- igual te digo que como ella te hable te morís – yo no entendí eso, pero Dario continuo hablando-

-          Jodéme que es… -Peter asintió, y yo como curiosa que soy tuve que preguntar-

-          ¿Qué pasa?

-          Seguí, seguí –El periodista me miraba embobado-

-          ¿Que siga qué?- respondí incrédula-

-          Seguí hablando que me muero –dramatizo un poco, mire a Peter para que me explicara, pero este estaba tentadísimo mirando a Darío escuchándome-

-          Gorda, a este cheto, le encanta las mujeres españolas, su acento le puede, por eso te mira así, y por eso se está ganando una buena trompada –dijo en broma-

-          Bueno che! Bajále a la agresión –me volvió a mirar- entonces no querés acompañar a tu novio en la entrevista ¿aunque sea sin hablar? –yo mire a Peter completamente confundía, el me sonrió y mientras Darío preparaba toda la entrevista me susurro al oído-

-          Me encantaría que estuvieras a mi lado –si me dice eso, ¿Qué hago? Tenía dos opciones plantarle un beso primero y salir con él o salir corriendo directamente…hice lo primero, después de pedirle al entrevistador que por favor no me hiciera hablar, la entrevista se llevo a cabo.

Transcurrió muy divertida era, yo estaba al lado de Peter y solo lo miraba hablar y reía porque verdaderamente me hacía gracia, era cortita por tanto no nos llevó más de cinco minutos. Casi al finalizarla Barassi me hizo un halago que yo respondí con un “GRACIAS” no pude ser más tonta, ahora todo el mundo iba a saber que yo era de España, se iban a meter conmigo y con Peter… todo este tipo de cosas se me venían a la mente, pero decidí alejarla, por una cosa que me dijo Peter al comienzo y es que para poder mantener esta relación teníamos que ir de frente como siempre lo hicimos. Y así estaba yo, evitando que lo que diga la prensa me afecte, aunque no sé hasta qué punto pueda llegar a aguantar.

                Ya nos habíamos marchado de ese lugar y cuando salimos varias fotos nos tiraron, pero   intenté que no me afectara mucho ese “acoso” de la prensa hacia Peter y bueno hacia mi persona también.

                Eran las tres de la mañana cuando llegamos a mi casa entre besos y caricias. Entramos al piso besándonos, porque llevábamos varios días que por unas cosas y otras no teníamos  intimidad. Pero yo antes de continuar ese acto necesitaba que me respondiera a algo que me daba vueltas por la cabeza. Así, entre besos, conseguí hablarle.

-          Mmm amor…-dije cortándome por los besos- mmm gordo…bebé… -él seguía a lo suyo- tengo una pregunta –el paro de besarme y me miro para que continuara- ¿he hecho bien hoy? ¿Te arrepientes de haberme llevado a ese sitio? –dije con un hilo de preocupación-

-          ¡Qué decís mi amor! –me abrazo- ¿Cómo me voy a arrepentir? Si yo fui el que te insistió para confirmar. Además te digo que estuviste genial, no se te notaban para nada los nervios, te veías muy natural y hermosa. Incluso cuando hablaste con Barrassi fuera de cámara. Así que –me robo un beso- no vuelvas a decir esas cosas ¿sí? –me dio otro pico – ¡Te amo bonita!

-          Gracias! Yo te amo a ti bebé…

CONTINUARA....

RECUERDEN UNA SOLA FIRMA Y TRES NUEVOS CAPITULOS, PONGAN EN SUS FIRMAS ALGO QUE LAS IDENTIFIQUE, TWITTER, FOTOLOG O SOLO VUESTRO NOMBRE. LAS QUIEROOO

FATY***