viernes, 25 de mayo de 2012

CAPITULO 13

NUEVO CAPITULO ¡QUE LO DISFRUTEN! ¡NOS VEMOS MAÑANA!
¡¡FELIZ COMIENZO DE FINDE!!
Y FELIZ DIA DE LA PATRIA PARA LAS ARGENTINA JEJE



CAPITULO 13



—No que yo sepa, pero es que somos abstemios. –El GHB se daba la mano con los bares, porque el alcohol disimulaba muy bien su sabor especial. Al no haber bares en Hilisboro, era lógico que no hubiera tenido ningún caso de violación con Ruffies o GHB... aún. Tarde o temprano, algún chico del pueblo moriría a causa de ello, o pillarían a un culturista que lo utilizara, pero hasta la fecha su pueblecito se había mantenido inmune. Eso no quería decir que en Hilisboro no hubiera nadie que lo usara, sino que habían tenido suerte de que ninguna de aquellas personas hubiera muerto-

—Sigo sin saber adonde quieres ir a parar —dijo.

—¿Tú visitas mucho las zonas de bares? Cuando estás fuera de servicio, claro está.

—Mira, estoy demasiado ocupado y soy demasiado viejo para eso.

—Nunca se es demasiado viejo para eso, amigo; no tienes más que entrar un día y fijarte en todos los que tienen canas. En fin, estaba pensando que eres bastante nuevo en la zona, y que si no te acercas hasta Scottsboro o Madison County para divertirte un poco, no es probable que te conozcan fuera de Hilisboro, ¿no es así? De modo que tal vez podrías darte una vuelta por los clubes y los bares, escuchar lo que se dice, quizá mantener los ojos abiertos por si ves a alguien echar esa mierda en las bebidas de las mujeres. Ir de incógnito, supongo.

—Y estrictamente de manera extraoficial y solo —dijo Peter en tono irónico.

—Mira, tío, es mejor así. Que no sea oficial. Tú eres un hombre soltero con una vida social activa; ¿hay algo más natural? Y si duran te una noche de diversión adviertes algo u oyes algo accidentalmente, bueno, yo creo que hay posibilidades de que tengamos una causa. ¿Qué me dices?

—Que será muy difícil.

—Conforme. Pero, maldita sea, no me gusta encontrarme con cadáveres de chicas jóvenes arrojados por ahí en mi condado. Puedo recurrir a mis fuentes habituales y practicar unas cuantas detenciones por posesión de droga, pero eso no frenará a esos hijos de puta que merodean por los bares. Necesitamos una ventaja, y estoy convencido de que tú eres la mejor baza que tenemos.

—No nos conviene indisponernos con la DEA y tal vez echar a perder una operación que ellos estén llevando a cabo.

—Que se jodan —repuso Nicolas alegremente. Peter tuvo que reírse, porque todo aquello era en verdad un bonito montaje. Si en efecto daba con la pista de alguien, sería algo puramente accidental. Qué diablos, no le haría ningún daño pasar un rato en unos cuantos locales. Él era un experto en Operaciones Especiales, no en narcóticos, pero había visto lo suficiente para saber qué buscar.

—¿Quién más estará enterado de esto?

—¿De qué? —preguntó Nicolas aquejado de un súbito ataque de amnesia.

—Supongo que tú no podrás indicarme algún que otro local interesante que haya por la zona, ¿verdad?

—No hablo por experiencia personal, como podrás comprender, pero he oído decir que el Hot Wíng de Scottsboro tiene marcha. Podrías echar un vistazo en el Buffalo Club de Madison County, y también en el Sawdust Palace de Huntsville. Si te interesa, puedo hacerme con algunos nombres más.

—Consigúeme una lista —dijo Peter, y colgó.

Se recostó en su sillón y entrecerró los ojos mientras estudiaba el plan en su mente una vez más. No existían normas, porque estaba solo. Diablos, en realidad no existía ningún plan, sólo una misión de las de «mira a ver qué encuentras». Si se topaba con algo, iba a tener que actuar siguiendo su intuición, pero su entrenamiento le había enseñado a actuar con iniciativa en caso de duda.

Sintió el viejo golpe de adrenalina recorrerle las venas, la tensión de la emoción por lo que se avecinaba. Tal vez echara de menos la acción más de lo que había imaginado. Aquello no era lo mismo que una situación con rehenes o un compás de espera armado, pero sin duda alguna igual de importante. Estaban violando y en ocasiones matando a mujeres con ayuda de GHB; si él pudiera pillar a un hijo de puta echando algo en la bebida de alguien, con gusto le pondría de cojones contra la pared.





~~~~****~~~~

Aquella noche Lali llamó insegura a la puerta, adornada con una complicada vidriera, de la casa de Gastón Dalmau. La puerta en sí misma era una obra de arte, pintada en un tono azul que hacía juego con las persianas, y con los detalles perfilados en un verde oscuro que recordaba a un bosque; dado el número de plantas en macetas que llenaban el amplio porche, aquella analogía no resultaba muy descabellada. La vidriera relucía como si acabaran de limpiarla aquel mismo día con vinagre. La puerta estaba flanqueada por dos lámparas antiguas de bronce que arrojaban una luz suave que daba a la entrada un aspecto acogedor e invitaba a pasar.

A través del cristal vio que se acercaba una figura borrosa; acto seguido se abrió la puerta y apareció Gastón Dalmau en persona, sonriente.

Hola, Lali, ¿cómo estás? Vamos, pasa. —Dio un paso atrás e hizo un gesto con la mano—. Tengo la sensación de que hace siglos que no te veía. No paso por la biblioteca tanto como debería. Desde que he abierto la tienda en Huntsville, parece que no me queda tiempo libre.

Gastón siempre había tenido algo que lo hacía sentirse a uno como si fuera su mejor amigo. El contacto que había tenido Lali con él era limitado, pero su actitud amable disipó parte del nerviosismo. Era un hombre delgado y pulcro, ataviado con unos pantalones informales de color tostado y una camisa de batista con los puños remangados. Medía aproximadamente uno setenta y ocho, tenía el cabello rubio y los ojos verdes y una sonrisa fácil que hacía que uno sintiera automáticamente deseos de sonreír también.

—Los negocios prósperos tienen esa costumbre —dijo Lali, siguiéndolo a la salita y tomando asiento en el abultado sofá floral que él le indicó.

Así es. —Sonrió tristemente—. Paso una gran parte de mi tiempo libre yendo a subastas. Muchas veces no hay más que basura y reproducciones, pero de vez en cuando aparece una joya auténtica. La otra noche compré un biombo oriental pintado a mano por menos de cien dólares, y lo vendí al día siguiente por tres mil. Me vino un cliente que estaba buscando justamente una cosa así.

—Hace falta tener buen ojo para saber distinguir entre antigüedades verdaderas y reproducciones —comentó Lali—. Y años de estudio, supongo.

Gastón se encogió de hombros.

Yo he aprendido aquí y allá. Me gustan los muebles antiguos, de modo que es lógico que preste atención. —Apoyó las manos en las caderas y estudió a Lali de la cabeza a los pies. Normalmente, un examen así la habría hecho sentirse incómoda, pero Gastón tenía un brillo en los ojos que decía: «¿Qué, verdad que es divertido?»—. Así que quieres un cambio, ¿no es así?

—Un cambio total —respondió Lali con sinceridad—. Estoy que da pena verme, y no sé cómo corregirlo. He comprado cosméticos y he probado a pintarme, pero tiene que haber un truco o algo así, porque el resultado ha sido horroroso.

Él rompió a reír.

—En realidad, la cosa tiene varios trucos.

—Lo sabía •—murmuró Lali indignada. ¿Qué les habría costado a los fabricantes indicar en el envase del producto la manera correcta de aplicarlo?

—En su mayor parte, es cuestión de práctica y de aprender a no usar demasiado. —Hizo un gesto con la mano como para desechar la idea—. Maquillarse es fácil; yo puedo enseñarte en menos de una hora. ¿Qué más tienes pensado hacer?

Lali sintió que le ardía la cara por tener que enumerar sus defectos. Por amor de Dios, ¿acaso no eran evidentes?

—Bueno, el pelo. Estaba pensando en que Wilma me diera unos reflejos...

—¡Dios santo, no! —exclamó Gastón horrorizado. Lali lanzó un suspiro.

—Exactamente la misma reacción que ha tenido mi familia.

—Escúchalas —aconsejó Gastón—. Ellas saben de qué están hablando. Wilma no se ha puesto al día de las tendencias ni de los últimos avances en productos químicos. Dudo que haya asistido a un desfile de peinados desde que se sacó la licencia hace cuarenta años.

Hay algunos estilistas buenos en Huntsville y en Chattanooga que no te quemarán el pelo hasta la raíz.

Lali se estremeció al imaginarse calva. Gastón tomó un mechón de cabello en la mano y lo palpó con los dedos.

—El pelo lo tienes sano —dijo—. No se aprecia ningún estilo en particular, pero está sano.

—No tiene cuerpo.

Ya que había empezado, estaba decidida a no dejar pasar ni el menor defecto.


________________________________________________________

BEGO @beazam29: ¡PRIMERA EN FIRMAR!

NO ME PUEDO ENTRETENER A CONTESTAR. ¡ESTOY VOLANDO!

¡¡¡GRACIAS POR COMENTAR Y SIGAN ASI!!!

LAS QUIERO

FIRMEN

FATY****

16 comentarios:

  1. alèèèè y llego el tanto esperado encuentro entre gaston y lali...ya va a llegar el cambio radical no? quiero laliter!!! mas nove mas todo ajajaja me encanto el cap... ya quiero ver cual va a ser y como va a resultar lali despues del cambio, como la van a mirar los demas...me voy a seguir estudiando! te mando un abrazo y obvio que MAS NOVE!!! :d giulia

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ag y nosotros tambien te queremos.. como siempre te dije aunque no te conozca porque estamos lejos y demas cosas, me transmitis confianza y sos como un amiga ya! besos Giulia

      Eliminar
  2. Lali esta loquita con su cambio de imagen y Peter en su salsa, quiere accion, poco a poco se hace mas entretenida, espero el proximo

    ResponderEliminar
  3. Lina (@Lina_AR12)25 de mayo de 2012, 21:45

    Lali a full con el cambio!Se viene lo bueno,q pensará peter cdo Lali termine con su cambio de imagen;JAJA

    ResponderEliminar
  4. Muy bueno :)
    Quiero mas!
    Un beso
    Juli♥
    @amorxca

    ResponderEliminar
  5. Buenisimo! Espero que el cambio de look sea genial!
    Mas nove!
    Fresy07

    ResponderEliminar
  6. Para mi q Lali y Peter se van a encontrar cuando saldran de Hilisboro ella para cambiar de look y el para ver si encuentra alguna pista sobre el GHB!!!
    Besos
    Giada

    ResponderEliminar
  7. Mmm me suena a que se van a encontrar en Hunstville en uno de esos bares!!
    No sé, pero me imagino que después del cambio, Gastón la va a llevar a uno de esos lugares para que vea si el nuevo look surte efecto!

    Quiero más!
    Lore

    ResponderEliminar
  8. Me encanta Gastón, puede ser q entre peluquerías y bares haya un encuentro ocacional?? Más nove!

    ResponderEliminar
  9. Se viene el cambio y las noches de bar!!!

    ResponderEliminar
  10. Tiempo d cambios ,para Lali ,su imagen,y para Peter ,volver con la accion.Deben encontrarse en algun bar o club,no me la imagino en un club,pero quien sabe si Gaston la lleva .D nuevo un buen recordatorio,mis amigas estan cerca,pero hay una k se encuentra muy lejos,ojo ,en España,pero lejos d Murcia,concretamente en Valladolid,y le encantan las antiguedades,k compra y restaura,ella misma.Mari,Marcos,y su hijo Mario.Un beso Faty.Gracias x hacerme recordar buenos momentos,con tus relatos.

    ResponderEliminar
  11. por fin pude ponerme al dia cn tu nove.. levaba tres dias sin leer =S y me perdi mucho!!!!!!!!!! y a pesar de haber leido varios capis seguido sigo queriendo mas mas y mas!!!!! muchos besos Faty MUACKS ♥

    ResponderEliminar